Un niño de cinco años de la ciudad de Edmonton (Canadá), apuñaló y mató a su hermano, de siete, en una riña familiar, aunque no enfrentará cargos por el asesinato, informaron medios locales.
Según se indicó, el hermano mayor murió como consecuencia de las heridas provocadas por puñaladas en el pecho después de una pelea entre los dos niños ocurrida el domingo. No obstante, bajo la legislación canadiense, el menor es demasiado pequeño para que pueda tener responsabilidades penales.
Según el periódico Edmonton Journal, los padres de los niños eran kurdos iraquíes que llegaron a Canadá como refugiados hace unos años. Se relata que vivían en un pequeño pueblo cerca de la frontera entre Irak y Turquía. Tras el ataque químico que sufrió la localidad una oleada de kurdos iraquíes llegó a Canadá entre 2002 y 2006.
Los progenitores están preparando el funeral del pequeño y no han hecho declaraciones acerca del incidente, que ha conmocionado a la comunidad kurda en Canadá. "A veces, los niños juegan y no están a salvo", afirmó un representante de la Asociación de Amigos de los kurdos canadienses.
"Estas personas atraviesan muchas dificultades, aunque esta tragedia podría haber ocurrido en cualquier familia", añadió, según el diario canadiense. fuente.andina.com
Según se indicó, el hermano mayor murió como consecuencia de las heridas provocadas por puñaladas en el pecho después de una pelea entre los dos niños ocurrida el domingo. No obstante, bajo la legislación canadiense, el menor es demasiado pequeño para que pueda tener responsabilidades penales.
Según el periódico Edmonton Journal, los padres de los niños eran kurdos iraquíes que llegaron a Canadá como refugiados hace unos años. Se relata que vivían en un pequeño pueblo cerca de la frontera entre Irak y Turquía. Tras el ataque químico que sufrió la localidad una oleada de kurdos iraquíes llegó a Canadá entre 2002 y 2006.
Los progenitores están preparando el funeral del pequeño y no han hecho declaraciones acerca del incidente, que ha conmocionado a la comunidad kurda en Canadá. "A veces, los niños juegan y no están a salvo", afirmó un representante de la Asociación de Amigos de los kurdos canadienses.
"Estas personas atraviesan muchas dificultades, aunque esta tragedia podría haber ocurrido en cualquier familia", añadió, según el diario canadiense. fuente.andina.com
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