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domingo, 2 de agosto de 2009

El enfrentamiento entre terroristas y policías habría durado una hora

Tres policías fallecidos y dos civiles (ambas mujeres) es el lamentable saldo que se conoce hasta ahora a consecuencia del ataque terrorista perpetrado esta madrugada contra un puesto policial ubicado en el poblado de San José de Secce del distrito de Santillana, en la provincia de Huanta, Ayacucho.
El coronel Héctor Silva, jefe del Estado Mayor Operativo Policial del VRAE, informó que el ataque ocurrió entre las 23:30 horas del sábado y se prolongó hasta esta madrugada. “Sin duda ha habido una resistencia feroz por parte de los efectivos de la base policial de San José de Secce”, declaró el jefe policial a la agencia Andina
De acuerdo a las primeras investigaciones – dijo- los efectivos policiales fueron atacados con disparos infralaser, cohetes o morteros y los atacantes destruyeron el parapeto de trinchera, “pero hubo resistencia”.
“Los atacantes no han logrado tomar la base, los efectivos han tenido una respuesta fuerte y contundente y ellos inmediatamente han tenido que replegarse y cargar a sus muertos y heridos”, dijo al señalar que se están haciendo las investigaciones del caso para capturar a los autores de este hecho.
La localidad de San José de Secce es un lugar apartado de la sierra de Huanta, cuya base policial antiterrorista pertenece al área geográfica del Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE) y está fuertemente armada para impedir el tránsito de la droga en ese punto.

FEROZ COMBATE
Hëctor Silva también confirmó que dos personas de sexo femenino, civiles, fallecieron en el ataque, las mujeres serían familiares de uno de los policías que lamentablemente se encontraban en la comisaría cuando empezó el ataque.
El enfrentamiento entre la policía y los atacantes empezó media hora antes de la medianoche del sábado y duró hasta las 00:30 del domingo.
“Estaba durmiendo cuando las ráfagas de disparos me despertaron. No me atreví a salir, porque mi casa está muy cerca de la comisaría y estaba demasiado asustado”, contó dijo a la agencia AP, Hugo Bermudo, un empleado municipal de Santillana que reside a una cuadra del puesto policial.
“Luego que acabó el enfrentamiento los policías siguieron disparando. Me acerqué a mi ventana y vi la calle vacía y un policía que pasaba gritando con una ametralladora en el brazo. Gritaba diciendo: “no salgan de sus casas, es peligroso””,
relató.
fuente:elcomercioperu.com

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